Ana María de Campos y Cubillán nació en Los Puertos de Altagracia,
Edo. Zulia, el 2 de abril de 1796.
Hija de Domingo José de Campos Perozo de Cervantes y de María Ana
Cubillán de Fuentes Vera.
Perteneció a una de las familias más aristocráticas de la región,
de educación propia para las damas de la época, lo que no evitó convertirse en
una excelente Amazona.
Apoyó el movimiento independentista durante la ocupación realista
del Lago de Maracaibo por parte del Mariscal de Campo español, Francisco
Tomás Morales. Ana María fue acusada de haber organizado reuniones
clandestinas y de decir en público: “Si Morales no capitula,
monda" ( Si no se rinde, muere). Posteriormente, al ser
interrogada por el oficial español, Campos confesó ser la autora de
aquella afirmación; y al negarse a presentar disculpas, Morales la
condenaó a ser flagelada públicamente, descamisada por las calles
de Maracaibo a espaldas de un burro, en señal de oprobio, mientras
le daba latigazos el verdugo Valentín Aguirre, quien después de
cada azote le preguntaba si quería ofrecer disculpas, a lo que ella
respondía en alto, “Si no capitula, monda”.
Esta heroica zuliana soportó el suplicio estoicamente, sin embargo
el padecer físico resultante le costó la vida años más tarde; disfrutando la victoria de los patriotas en la Batalla
Naval del Lago de Maracaibo el 24 de julio de 1823; y la capitulación de Morales.
La heroína zuliana Ana María Campos falleció en Maracaibo, el 17
de octubre de 1828.
Lic. Sonia Verenzuela T.
2016
FUENTES CONSULTADAS
Leyendas históricas de Venezuela, El Nacional, 1999.
ICONOGRAFÍA